A partir de 2 o 3 años, un niño comprende historias cada vez más complejas.
La lectura es fuente de placer para el niño, pero también es un acercamiento a la escritura y al descubrimiento. Los libros le ayudan a construirse y a desarrollar su curiosidad innata.
Albumes de todo tipo, abanico variado a disposición de un lector cada vez más exigente.
Libros para prelectores. Libros para ofrecer a partir de dos o tres años.